Con prueba de ADN, confirman a último descendiente de Toro Sentado

Con nuevas pruebas de ADN, científicos lograron confirmar que existe un descendiente vivo del jefe Sioux ‘Toro Sentado’.

Con una técnica nueva de ADN, científicos de la Universidad de Cambridge (Reino Unido) lograron comprobar el lazo sanguíneo entre el jefe indígena Toro Sentado, y un descendiente que resulta ser su bisnieto, único pariente vivo del jefe de la tribu de los sioux.

Tatanka Iyotanka, más conocido como Toro Sentado (Dakota del Sur; circa 1831 – 15 de diciembre de 1890), fue un jefe indígena y líder espiritual de los lakota. Es recordado por ser uno de los jefes encargados de luchar frente al acoso del ejército estadounidense sobre sus tierras ancestrales.

El bisnieto de Toro Sentado

131 años después de que Toro Sentado muriese, y gracias a una prueba de ADN, un hombre llamado Ernie Lapointe se convirtió oficialmente en su bisnieto.

Para llegar al hallazgo, un equipo comandado por el profesor Eske Willerslev, de la Universidad de Cambridge (Reino Unido) comparó el ADN del cuero cabelludo del líder indígena con muestras de ADN de Ernie Lapointe.

Lapointe ya había afirmado que él era descendiente de Toro Sentado, pero no habían podido confirmar una relación familiar. La única muestra de ADN del jefe Sioux se encontraba en un mechón de pelo de unos 5 a 6 centímetros, y en un estado “extremadamente degradado”, según los expertos.

Para llegar al resultado, tardaron 14 años hasta obtener una muestra de ADN de ese mechón, pero finalmente lo lograron, y los resultados fueron expuestos en la revista especializada Science Advances.

El nuevo estudio de ADN abre posibilidades para otras figuras históricas

Se trata de la primera vez que se utiliza ADN antiguo para corroborar la conexión familiar entre una figura pública muerta hace tanto tiempo, y un descendiente vivo.

El mechón de Toro Sentado había estado guardado durante más de un siglo a temperatura ambiente en el Museo Smithsonian de Washington, por lo que su estado era deplorable.

Pero luego de un arduo trabajo, el equipo logró corroborar que Lapointe es el descendiente vivo más cercano.

Lapointe, quien actualmente tiene 73 años celebró que por fin se reconozca su conexión, y ahora quiere honrar el legado de su bisabuelo, trasladando sus restos a un lugar que tenga más relación con sus tierras ancestrales.

El nuevo estudio de ADN del descendiente de Toro Sentado , abre las puertas para realizar nuevos hallazgos que permitan vincular a familiares vivos con figuras históricas.